ENSAYO SOBRE TEORIA DEL ESTADO
“APUNTES PARA
UN ESTADO
PLURINACIONAL”
INTRODUCCIÓN.
El análisis descriptivo que nos
plantea la autora del presente trabajo, presenta una posición altamente crítica
sobre la síntesis histórica que vivió el país desde los albores de la república
hasta la consolidación del estado plurinacional, como la “única” alternativa
viable rumbo a la emancipación y de esta manera forjar el horizonte de
liberación indígena, que pareseria ser la única alternativa que tiene el país
para obtener su emancipación cultural, económica y social.
DESARROLLO.
Desde la crisis política
del 2000 y desde la victoria
electoral de Evo Morales el 2005, la oposición política empezó a señalar
que había dos Bolivias, una indígena, arcaica, subdesarrollada y pobre asentada
en el occidente y otra moderna,
con un mestizaje regional, exportadora y próspera, en el oriente. La polarización de estas dos
naciones hacía inviable cualquier futuro en común, salvo la construcción de
institucionalidades cada vez más diferenciadas (proyecto autonómico,
federalismo, gobierno binacional, separatismo).
La élite boliviana asentada en Santa Cruz: un regionalismo que devino
nacionalismo; y por otra parte, la propuesta de los movimientos indígenas y populares de constituir un Estado
plurinacional.
Las dos Bolivias, compartido por el opresor y
el oprimido y ante la consolidación política indígena y popular, la élite tradicional atina solamente a
llevar hasta sus últimas consecuencias el curso de la historia colonial.
Se debe pensar que el movimiento
indígena contemporáneo es un sujeto articulador de lo plurinacional,
y al proceso de transformación actual como un proyecto
plurinacional, y la contradicción
que la
descolonización pase por
el horizonte
criollo-mestizo del Estado-nación.
El horizonte de
liberación indígena, que es muy anterior
al de la independencia, empieza
con
el Taqui Onkoy
de 1560 y las rebeliones
que culminan con la
muerte de Tupac Amaru I en 1572, y el horizonte nacional-popular
constituido en la Revolución de 1952,
como un proyecto plurinacional de la autodeterminación propia para responsabilizarse por
articular lo común y por otra,
la incapacidad de las élites
señoriales hoy atrincheradas en Santa Cruz como el núcleo duro y articuladas a facciones de élites
regionales en la “Media Luna” y las otras
ciudades capitales– de constituir un proyecto nacional
es solamente la consecuencia lógica de su vinculación histórica con el Estado
y la nación boliviana, y finalmente, de su contradicción interna como élite colonial
y periférica.
La autora sostiene que el horizonte
indígena, es la conjunción de memorias
del pasado
y aperturas hacia el futuro, actualizadas en el momento presente,
en este
momento constitutivo.
El horizonte
de liberación
indígena, en los diferentes sujetos
indígenas que lo asumieron (las
rebeliones de 1781, 1899, 1952
y otras) y con proyecto distintos,
específicos de su momento
histórico (el preinca del Taqui Onkoy, el neoinca de Tupac Amaru o Juan Santos Atahuallpa en el Perú, el comunario de
Tupac Katari y Zárate Willka, el nacional-popular de mineros y “campesinos”, el democrático de la huelga minera de 1979, etc.),
La conquista española en su momento se
constituye como elemento determinante en
la interrupción de la autodeterminación de una matriz civilizatoria y homogeneización de su diversidad interna como “indio”, como sometido a otro
horizonte civilizatorio, se convierte en la memoria común a todos estos sujetos y proyectos.
El análisis del horizonte nacional,
constituido por diferentes sujetos criollo-mestizos desde el siglo XIX, nos interesa
porque desde 1952 se enlaza
con el horizonte indígena y popular (lo que
Zavaleta Mercado llamó lo nacional-popular), y es posible que hoy dado el vaciamiento criollo-mestizo de la representación
nacional se entreteja con el indígena, en una direccionalidad histórica
inédita, diferente a las anteriores rebeliones, y que permite plantear
un proyecto plurinacional.
Situaciones de crisis política, sobre todo del 2008, con la aprobación de
los estatutos autonómicos departamentales, la violencia desatada en Sucre y
Oruro para evitar la discusión
y aprobación de la nueva constitución, la toma de instituciones públicas en la
llamada Media Luna que culminó con la masacre
de El Porvenir, Pando
y el acuerdo en el congreso para llamar al referéndum por la
constitución fueron algunos de los episodios políticos que marcaron el camino
para la toma de decisiones políticas contundentes, como desafíos de la construcción de un Estado
plurinacional con autonomías, de una gestión
pública que encamine las transformaciones propuestas, y el tema medular de dependencia energética, encarecimiento de la vida, y reproducción de la lógica
de mercado.
CONCLUSIONES.
En
la construcción de los Estados intervienen todos los elementos que hacen a la
sociedad, la política y la historia viva de un país y no es mérito propio de
una sola condición social o cultural, ya que un estado como el nuestro no solo
está habitado por la cultura aimara e indígena y tomar esa síntesis como una
realidad histórica es tener un enfoque miope de la verdadera realidad del país.
Es
evidente que hubieron situaciones de crisis política donde los pocos que
gozaban de poder, fortuna y grandes privilegios en este país por muchos años y
generaciones, hicieron lo posible para impedir que se consolidara un estado con
identidad de las mayorías y se reconocieran sus reivindicaciones ancestrales.
BIBLIOGRAFIA.
“Apuntes para un Estado Plurinacional”
(Ximena Soruco Sologuren).
No hay comentarios:
Publicar un comentario